Ya han comenzado las obras
de rehabilitación de la casa conocida
como palacio de los Marín de Rodezno, ubicada en las calles Mayor y Garrán, para
convertirla en viviendas para 18 usuarios de Asprodema, “La Sierra”, de Nájera.
Las obras, que tienen un presupuesto de 1.275.744 euros, de los que 1.020.595
aporta el Gobierno de La Rioja, serán realizadas por la empresa de construcción
Proviser, y dirigidas por el arquitecto, Francisco Iturriaga, y el arquitecto
técnico, Jesús Zalabardo. Cuando éstas terminen, la idea es que el Ayuntamiento
de Nájera se haga con los bajos para ubicar en ellos el Juzgado de Paz de
Nájera, que ahora mismo está ubicado en el edificio del Museo Histórico
Arqueológico Najerillense, y hay que subir 42 escalones para acceder a él. Esta
casa consta de tres plantas en sillería, rehecha la inferior, con vanos
adintelados de placa, oreja, balcones y herrajes del siglo XVII, y escudo en
esquinazo a la Calle Mayor, sobre Cruz de Calatrava, cuartelado primero de
cinco cabezas de moro y brazo armado, segundo de torre, tercero terciado en
palo de bandas, tres lises y león rampante a árbol y medio partido de espada
tronchada por banda, cuarto de tres lises tronchado por banda, y quinto en
punta de ondas el todo con bordura de aspas. Estaba construida ya para el año
1.675, por don Francisco Marín de Rodezno. En sus bajos estuvieron ubicadas durante
muchos años, la tienda “Almacenes Hidalgo” y el “Windy Bar,” en la Calle Cuatro
Cantones, y en la Calle Mayor, además de un tercio de la misma tienda:
“Almacenes Hidalgo,” la lóbrega tienda de la Angelita, en la que se vendían
botijos, huchas, tiestos y cazuelas de todos los tamaños, hechos con barro,
además de cucharas y toda suerte de útiles de madera, vino, gaseosa, atún en
aceite y algunos productos más. Muchos años después de que esta tienda cerrara,
mi amiga Chuchi y su marido, Victoriano de Santiago, pusieron allí una
churrería, para seguir la tradición del señor Leandro Ochoa, padre de la
primera. A pesar de que la casa está documentada con la dirección Cuatro
Cantones, 1, la entrada la tenía por la Calle Mayor.