Se hacen llamar “Rumba Cubana”, aunque de cubanos no tienen
nada. Son cuatro. Y viéndolos en el cartel, casi que te daban ganas de pasar de
ir a verlos al Kien. Mas qué sorpresa nos tenían reservada. Son buenísimos. Tanto
es así, que después de estar haciéndonos disfrutar y bailar con canciones de
los Chichos, los Calis y los Chunguitos, versionaron como nadie la canción de
Despacito. Si alguno de los que leáis esto tenéis negocio de hostelería: bar,
discoteca, hotel o salones de bodas, no lo dudéis y contratadlos. Seguro que
después de hacerlo me lo agradeceréis. Enhorabuena a “Rumba Cubana”, y
gracias a Manolo por hacernos pasar una hermosa noche gitana.