Como ya os he dicho en alguna ocasión, siempre
que paso repartiendo por donde están los encargados de la canalización del gas
haciendo zanjas, bajo la atenta mirada de Juan, el Arqueólogo, me paro a ver si
veo algo interesante. Esta semana ha aparecido un sillar en el Arrabal de la
Estrella que podría hacernos pensar que es parte de una casa, un taller o una
fábrica, por estar situado hacia el centro de la carretera. Pero mira por
dónde, la aparición de este sillar viene a confirmar dos cosas: la estulticia de quienes nos
gobiernan -creen que el río Najerilla es de juguete-, y la certeza de mis
advertencias sobre la construcción de la Residencia de Ancianos, el Centro de Día
y el Pabellón Multiusos en una “zona inundable” de Peñaescalera, ya que con
toda probabilidad se trata de uno de los muchos muros de defensa que en esa
zona se construyeron para desviar las aguas del río Najerilla, que fluían
pegadas a la falda de Malpica. De hecho, en aquellos años hubo una gran
polémica por ver por dónde hacían la carretera de salida de Nájera, si por el
Camino del Cristo -o de Arenales-, o por Peñaescalera, ya que las obras tenían
que pagarlas también los habitantes de los pueblos vecinos. Y hete aquí que
eligieron hacerla por Peñaescalera, desviando con muros defensivos las aguas del
bravo río Najerilla. Y lo más curioso de todo, es que después de los años, la
tuvieron -y tenemos- por los dos sitios.