Quien quiera puede
preparar un camión de leña, palos largos para remover las ascuas, vallas de
seguridad y un Disco-Móvil, y convocarnos a los najerinos el día veinticinco de
Octubre, festividad de San Crispín, a asar patatas en la orilla del río, el año
que viene. Si así no lo hiciere nadie, cállense para siempre, y respeten que la
Peña juventud la celebre cuando lo estime conveniente. Por lo que a mí
respecta, felicidades a dicha Peña, por regalarnos una preciosa noche.