Eso es lo que, a mi
juicio, ha ocurrido esta tarde en el Claustro de los Caballeros de Santa María
La Real, en la entrega de la primera Medalla Ciudad de Nájera, en su modalidad
plata, a la orquesta de plectro La Orden de la Terraza. Un honor, por
ser reconocida públicamente después de tantos años de ninguneo. Y una lástima,
porque un acontecimiento de esta categoría, se merecía tener el Claustro de los
Caballeros lleno. -Seguiremos escribiendo.-