Lo que el río Najerilla
ha reclamado con la última crecida es el tercer ojo del Puente de Piedra. Cualquier
parvulito puede darse cuente de ello trazando una línea imaginaria en la
fotografía que encabeza esta entrada. Causa estupor escuchar cada año que las
florecillas, las hierbas, las aneas y los pequeños arbustos son un serio
peligro para nuestra ciudad en caso de crecidas. Y lo causa, porque además de
haber recibido voluntaria y libremente una jugosa subvención de Bruselas para
el proyecto del visón europeo, cuyo corredor natural es precisamente esa
vegetación que forma parte del ecosistema de nuestro río Najerilla, se dice sin
tener en cuenta que en los últimos años se han ido tapando los ojos del Puente
de San Juan de Ortega, reduciéndose considerablemente la sección hidráulica del
río, sin que nadie se eche las manos a la cabeza. Estoy más que harto de oír
que con el pantano de Mansilla no corremos ningún peligro de crecidas, para
justificar el haber dejado el Puente de Piedra con dos ojos y medio abiertos,
de los ocho que tenía, a la par que se dice, para justificar masacrar el río,
que sí lo corremos con la vegetación que crea. Como he dicho aquí mismo muchas
veces, el reservorio de Mansilla regula simplemente el 20% de la cuenca
vertiente, ya que los ríos Calamantío, Roñas, Valvanera, Brieva, Tobía,
Cárdenas y otros no vierten en el embalse. Además, teniendo en cuenta que las
crecidas se producen principalmente en invierno y primavera, como corresponde a
un río de tipo pluvionival, que es cuando el embalse se encuentra a un 70 – 85%
de su capacidad, el efecto sería el contrario porque tendrían que abrir los
aliviaderos, con lo que la población de Nájera sí correría un serio peligro por
la reducción de desagüe del Puente de Piedra. Esto, por si algún insensato lo
duda, está recogido tanto en la elaboración de “Plan Hidrológico de la cuenca
del Ebro”, como en el “Estudio de Inundaciones Históricas. Mapa de Riesgos
Potenciales de la cuenca del Ebro”, de diciembre de 1.985, realizado por la
Comisión Nacional de Protección Civil. Tanto en el Plan como en el Estudio, el
tramo urbano de Nájera se incluye como de riesgo intermedio -nº 33 de la
clasificación-, y pueden verse las citas de varias avenidas en los años 1.909,
1.916. 1.950, 1.959, 1.961… Y en cualquier momento podemos sufrir otra. Así que
dejen de confundir a la gente de bien, y llamen a las cosas por su nombre, ya
que la vegetación del río no es el problema. El verdadero problema es querer
hacer del río Najerilla un río de
diseño, cual si fuera un riachuelo cualquiera.