El viernes 23 de Mayo, con el título de “Caciquismo de pata negra”, os
colgué la insólita persecución a la que está siendo sometida la familia de los
“Belias” por cumplir con lo que el Ayuntamiento les había ordenado. Como os decía
en dicho post, a quienes nos desgobiernan no les debió gustar nada que esta
ejemplar familia decidiera vallar el solar resultante del derribo del taller -porque
se lo llenaban de coches-, y ahora les obligan a derribar, quitar, desmantelar
–como vosotros queráis- la tejavana que tienen desde hace un montón de años a
la entrada de sus casas, a pesar del ser el único espacio con sombra, donde
Celia, una señora mayor con una discapacidad del setenta por ciento, puede
estar sentada a la sombra. Así las cosas, con las fotos que os cuelgo en el
post, yo os pregunto a todos los seguidores del blog: ¿A quién le molesta un
tejadillo dentro de una propiedad privada y vallada? ¡Que alguien me dé una
respuesta!