La desidia, incapacidad e incompetencia de los berengüelos nos va a salir
muy cara a todos los najerinos. Ya advertí el otro día que siento vergüenza ajena
todas las mañanas, cuando veo que una decena de conductores tienen que darse la
vuelta en Peñaescalera jurando en arameo. También dije que se pierden entre la
calle Hormilla y la Residencia de Ancianos muchos de ellos. Al parecer, algunos
conductores se han cansado ya de tanto cachondeo, y, como podéis comprobar en
la fotografía, han decidido tirar por el camino recto: Apartar las vallas para
seguir su camino, materializando así su
cabreo. Soslayando quién es el responsable de que se haya llegado a esto, quiero
dejar constancia una vez más de que este es un problema muy serio, y de que
allí, más pronto que tarde, va a haber muertos. De hecho, un vehículo ya se
estrelló contra el muro protector al intentar evitar un desprendimiento. Y
cuando se habla de peligros tan serios como ciertos, cualquier persona
biennacida tiene que tomarse esto muy en serio, más allá de los perjuicios que
pueda ocasionarles, que se los ocasiona, a la Feria del Mueble, a la hostelería y al comercio.
Así que, por el bien de todos, ya pueden ir adoptando las medidas pertinentes para acabar de una vez por todas con este grave
problema los del Ayuntamiento. Aquí no vale
el “yo no pensaba”, “yo no sabía”, “quién lo iba a decir”… porque de sobra
saben que circular o pasear por allí, es como meterse en la boca del lobo.