El nuevo Equipo de Gobierno del
Ayuntamiento de Nájera acaba de conseguir lo que el anterior Ayuntamiento fue
incapaz de cumplir, a pesar de haberlo acordado en una Junta de Gobierno Local,
celebrada hace cinco años: Derribar el edificio declarado en ruinas de la calle
Cantarranas. Como todos recordaréis, los nuevos gobernantes se propusieron
conseguir el derribo de dicho edificio a los pocos meses de tomar posesión de
sus cargos, pero esto no fue posible porque el Banco Santander, propietario
del edificio, se ha negado a cumplir los acuerdos de la Junta de Gobierno
Local, a pesar de ser multado en varias ocasiones con 950 euros. Ayer por la mañana,
¡por fin!, la Empresa najerina Construcciones Costa Rioja comenzó el derribo. Espero
que tomen buena nota todos los escépticos.