La víspera de San Pedro, por la noche, los “Chiguitos
de Marcelino” estuvieron de ronda por las calles de Nájera para amenizar las
fiestas un año más. Comenzaron en la terraza del bar “La Fábrica”, donde los clientes disfrutaron a rabiar. Después recorrieron las calles del casco antiguo,
para terminar dentro del Kien, el bar que regenta Manolo, porque en la terraza
hacía fresco ya. Durante el recorrido, los “Chiguitos de Marcelino” fueron muy
aplaudidos por los najerinos que se paraban a escucharlos tocar. Y el que suscribe
disfrutó como un enano acompañándolos, a pesar de que al día siguiente tenía
que madrugar.