La noche del pasado sábado me
dijeron que los Padres Franciscanos abandonan en Enero de 2017 el Monasterio de
Santa María La Real. Y lo hacen, siempre según la información que me dieron,
obligados. Ante una noticia así, obviamente, me quedé anonadado. Y no es para
menos. Porque si esto es así, se abren muchos interrogantes: ¿Permanecerá abierta
Santa María La Real careciendo de Padres Guardianes? ¿Y si es así, cómo van a
suplir los cometidos que éstos tenían asignados? ¿Habrá visitas guiadas? ¿Se
oficiarán Misas? ¿Se cerrará para siempre? Estos interrogantes, dada la
trascendencia que el asunto tiene para Nájera, creo que merecen una rápida
respuesta. Y, por el bien de todos, ojalá sea positiva.