Confieso abiertamente que mi aparición en el festival MUWI La Rioja Music Fest, celebrado ayer en el patio de Bodegas Franco-Españolas, se debió a que actuaba el grupo Amaral y me apetecía mucho escucharlo en directo. Pero mi sorpresa fue mayúscula cuando descubrí a la banda vasca Bulego, que lo hicieron de maravilla, y a Rodrigo Cuevas, un artista como la copa de un pino. El concierto de este genial asturiano fue de los mejores que he visto. Es admirable su forma de compaginar la música con la protesta, y hacerlo, además, con el embrujo que lo hace. Desde el minuto uno nos tuvo a todos metidos en el bolsillo. Fue sencillamente espectacular. Después de zamparnos un bocadillo, llegó la actuación de Amaral, que, como era de esperar, llenó por completo el patio de Bodegas Franco-Españolas. Fue increíble ver a miles de personas cantando con alborozo todas sus canciones. La misma Eva, en un momento dado, confesó estar embelesada por semejante respuesta del público de La Rioja.
