viernes, 11 de junio de 2021

Aún podemos creer.

A primeras horas de la tarde de ayer, vi una escena de las que causan envidia sana y te hacen creer: una veintena de alumnas y alumnos recién graduadas/os, tomaban unos refrescos con su tutor en la terraza del Kien. Qué felices y orgullosos se tuvieron que sentir. Ellas/os, por haber logrado el pasaporte a la Universidad, y él, por tener el inmenso honor de compartir con su alumnado tanta dicha y felicidad. Cuando ves escenas como estas, no tienes más remedio que creer que no todo está perdido. Que aun hay esperanzas de crear un mundo mejor. Un mundo más justo, ecológico y humanitario, en el que jóvenes bien preparados nos gobiernen con prudencia, sabiduría y sensatez. ¡Aún podemos creer!