martes, 30 de noviembre de 2010

La que se avecina.

   Yo no sé si este fenómeno fue algo casual, o alguna marca Divina (como otrora lo fue la sangre roja sobre las puertas), señalando con nubarrones los lugares que deben ser castigados. Pero mucho me temo, cantores míos, que lo que ese cielo trata de decirnos, es que… ¡malos tiempos se avecinan!

lunes, 29 de noviembre de 2010

Tres vergüenzas en una.

   En la Plaza de Santiago, desde hace muchísimo tiempo existían dos vergüenzas que, ahora, como por arte de magia, se han convertido en tres.
   Me explico, nuestros conspicuos gobernantes (ahora igual lo vuelven a decir, aunque con la pasarela de los pescadores tienen bastante), en un alarde de heroísmo nacional, nos prometieron por activa y por pasiva que iban a quitar el casetón transformador que existe en medio mitad del parque de la Plaza de Santiago; pero como demostrar firmeza ante el poderoso no se lleva, se dijeron para sí: “pues les ponemos un gran cartelón a los vecinos, y como son medio tontos, pues van y no se enteran”. Y, ni cortos ni perezosos, colocaron allí el gran cartelón que anunciaba (y anuncia) la celebración en nuestra ciudad de la Exposición La Tierra Abierta: Nájera Legado Medieval, de mayo a octubre de 2.005. ¡Con un par!
   Por si esto fuera poco (el casetón no puede ser más horrible), ahora se les ha iluminado la sesera, y se han vuelto a decir: “pues como no lo vamos a quitar nunca, lo aprovechamos como portador de carteles, o cartelera, y aquí paz (en sus casas) y allí mierda (en las de los pobres moradores del lugar)”. ¡Y así lo han hecho! De momento nos han anunciando un “foro regional contra la violencia de género” (doméstica, estultos). Mañana… ¡Dios dirá!
   ¡Pues bien!, han de saber ustedes, señores gobernantes (de sus intereses), que el casetón de la Plaza de Santiago es un peligro cierto, porque está a escasos veinte metros de las viviendas (sólo lo separa de los dormitorios, la calle), distancia escasísima a todas luces, y puede producir efectos adversos no térmicos, provocados en los seres humanos por las radiaciones electromagnéticas, tanto por las estaciones de telefonía móvil, como por casetones y torres de alta tensión, como cefaleas, insomnio, alteraciones del comportamiento, ansiedad, depresión, cáncer, etc. etc. O sea que, aunque sólo fuera por cubrirse las espaldas (la gente suele tener memoria), deberían quitar de allí ese adefesio inmediatamente. Yo se lo he pedido varias veces. Ustedes obrarán (o no) en consecuencia. ¡Allá cada cual con su conciencia!

domingo, 28 de noviembre de 2010

Una guapísima Campeona.

   La guapísima niña najerina, Marta Alegría Turza, del Colegio Público Sancho III de Nájera, ha conseguido la medalla de plata de taekwondo, en la "Primera Jornada de Juegos Escolares de La Rioja", celebrada ayer en Logroño. Esta preciosa promesa najerina, representante del Club de Taekwondo najerino, ganó otra medalla de bronce el pasado año. En la fotografía, posa orgullosa con sus dos medallas, y con su hermana pequeña, guapísima también. ¡Suerte, Marta! Y gracias por pasear con honores por toda la geografía riojana el nombre   de Nájera.                                                                                                         

II Festival del Pimiento Riojano

    El cocinero Paco Carretero, junto con los integrantes de la Asociación Hostelera Barrios Históricos de Nájera, dentro del II Festival del Pimiento Riojano, ha elaborado en directo, en la Plaza de Santa Cruz,  un menú exquisito consistente en Suprema de pimientos riojanos, asados a la leña, con crujientes de jamón y su hilito de crema, como primero. Lomo de corderito lechal de los Cameros, macerado en manzanilla y Pedro Ximénez con salsa de mostaza antigua y helado de pimiento riojano, como segundo. Y, finalmente, dulce de pimiento riojano con láminas de queso fresco y su compota de frutas escarchadas, como postre. Obviamente, en este menú, el pimiento najerano fue el auténtico protagonista. Los miembros de la Asociación, repartieron entre los asistentes raciones del exquisito helado, así como la receta de este gran cocinero. El numeroso público que asistió al acto, pudo degustar también, los pimientos riojanos regados con un buen vino.

Continúa el parcheo.

   Con división de opiniones, continúa la labor de parcheo que la Brigada de Obras del Ayuntamiento de Nájera, está llevando a cabo en la importantísima arteria de Avenida de la Rioja. En el tema ha terciado nuestra besucona alcaldesa, que ha dicho, sin cortarse un pelo, que las obras de parcheo se están llevando a cabo, porque los vecinos de las diferentes calles parcheadas, no quieren poner dinero. Yo no voy a entrar a cuestionar si esto es o no cierto, pero sí quiero recordarle a ella, que una parte nada despreciable del pueblo dijo no a la desaparición de un Polideportivo nuevo, y desapareció. Del mismo modo, un gran número de najerinos está en contra de que se construya la Piscina Cubierta en el Paseo, y se está construyendo. Lo mismo ocurrió con las obras del “tercer puente” y de la “Residencia de Ancianos”, que ambas fueron rechazadas por una parte importante del pueblo, y se construyeron. Con las contribuciones especiales de la mejora de la Calle San Fernando y sus aceras, a ningún vecino se nos preguntó si nos venía bien que se hicieran o no, sino que nos cobraron un montón de dinero, sin saber si teníamos para pagar, o teníamos que pedir un crédito por ello. Y así podría estar media noche, recordándole a esta cariñosa señorita, la de obras que ha hecho sin permisos, sin licencias y sin consultar al pueblo. Y para acabar y no aburrir al que lea esto, solo recordarle que noventa y cinco de cada cien españoles dijimos NO A LA GUERRA, y nos llevó el entonces Presidente de su partido.

sábado, 27 de noviembre de 2010

Orgullosos de lo suyo.

   Así es como están en el Colegio Público Sancho Tercero, de nuestra ciudad. Orgullosos de la Escuela Pública; de su forma de enseñar; de su filosofía, y de poder brindarle a todos los chiquillos, más allá de su condición social, la oportunidad de poder ser algo de provecho, en esta competitiva sociedad. Para demostrarlo, han cogido un dibujo de uno de sus alumnos, y lo han fotocopiado a color, para ponerlo por todo el recinto,  demostrándonos a los demás, que saben apreciar lo suyo, y que no quieren que ningún político analfabeto y oportunista, se lo pueda quitar.

La vergüenza nacional.

   No me puedo explicar cómo puede haber alguien en esta ciudad que hable bien de ella, salvo que coma del pesebre municipal. Llevo más de un mes colgando vergüenza tras vergüenza, y aún no he hecho nada más que empezar. La que voy a colgar hoy, es ya de preocupar. La Plaza de San Miguel, construida en su día con dinero del “uno por ciento cultural”, no llegó a terminarse nunca, por auténtica desidia municipal. Es más, cuando se empezó, existían varias calles y alguna plaza del casco antiguo peatonalizadas, para que todos los najerinos las pudiéramos disfrutar sin sobresaltos y en bendita hermandad. Dándose el caso, por ejemplo, de que la Plaza de Santa Cruz, llegó a desbancar a la de España, porque para los niños y los mayores, era, además de más bonita, muchísimo más funcional. Pero hubo concejales del pepé, que como no podían circular por ellas, y mucho menos aún aparcar, se las cargaron todas ellas, dejándolas como estaban, para poder campar a sus anchas, y utilizarlas como aparcamiento particular. Sobre todo uno de ellos, que tenía allí el negocio, y mucho poder en la casa consistorial.
   La imagen que esta inacabada Plaza da de nosotros, Amigos cantores, nos tendría que avergonzar, porque creo sinceramente, que es “¡la vergüenza nacional!”

viernes, 26 de noviembre de 2010

Instinto maternal. (1)

                                               
      A esta pobre oveja hay que buscarle pareja, porque lleva la pobrecita más de un año dándoles calor a los hijos adoptados, y no le medran. Y como siga así, se nos va a morir de pena. Aunque pensándolo bien, igual le digo el próximo día que la vea, que se haga del pepé, y seguro que así, sus hijitos medrarán a base de bien. ¡Ya veré!

Por la puerta de atrás.

   Por increíble que pueda parecernos a todos, amigos cantores, al nuevo Ayuntamiento, recién construido e inaugurado, los minusválidos tienen que entrar por la puerta de atrás, cual si fueran leprosos. Y uno ya llega a pensar que esto no es casual; que esta señorita que nos gobierna, tiene tal obsesión por la armonía y el decoro, que no quiere que en la Plaza de España, nadie vea nada anómalo: ¡quiere que lo vean todo perfecto!
   Y esto tiene que ser así, porque el que suscribe, al igual que hizo en su día con el Puente de Piedra nuevo, ha consultado a distintos constructores y arquitectos, y todos le han dicho que la solución para quitar las barreras arquitectónicas era sencillísima, y no iba a costar más dinero. Pero hete aquí que no, que al igual que hizo con el puente nuevo, nuestra ínclita alcaldesa, ha pasado de los bienintencionados y desinteresados consejos. 

jueves, 25 de noviembre de 2010

Vertedero municipal.

   Lo de la subida al Alcázar, es ya de preocupar. No hay un solo día del año que pase por allí, que la vea limpia. Y eso, en gran parte, es por la desidia municipal. Porque les guste o no, lo sepan o no, se hayan dado cuenta o no, son nuestros conspicuos gobernantes quienes nos tienen que dar ejemplo a los ciudadanos de a pie, limpiando, conservando, recuperando, rehabilitando y todos los tandos que queráis. Y lo que vemos los ciudadanos de a pie, es todo lo contrario: Desidia, dejadez, pachorra, permisibilidad, abandono, extralimitación, destrucción, hundimientos, desaparición de nuestra Historia y de nuestra Memoria, ruinas y lo que vosotros queráis añadir. ¿Hasta cuándo van a seguir dando esta deplorable imagen de nuestra ciudad?

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Lo que la falacia esconde.

   El comienzo de las obras de la faraónica Piscina Municipal, ha puesto de manifiesto que el discurso de nuestros gobernantes es absolutamente falaz. Estos majagranzas, han repetido hasta la saciedad, tanto en Plenos como en ruedas de prensa (de hecho hoy mismo viene en La Rioja), que el terreno en el que van a construir la Piscina Cubierta, ha sido toda la vida un vertedero. ¡Y eso es falaz!
   Ahora mismo podría colgar yo más de doscientas fotografías antiguas que demuestran que esos terrenos albergaron siempre frondosas choperas. Pero es que a mí, particularmente, no me hace ninguna falta, porque en esas choperas (en ese mismo lugar) he estado durante toda mi infancia cogiendo culebras, y toda mi juventud tomando la fresca, cortejando con chicas y comiendo chuletas. Por consiguiente, no me pueden decir a mí unos analfabetos ecológicos, que eso fue toda la vida un vertedero, y que nunca ha habido choperas.
   Otra cosa diferente es que todos y cada uno de los Ayuntamientos hayan demostrado siempre un vergonzoso desprecio por dichos terrenos, permitiendo que echaran escombros, para nivelar las choperas con el Paseo.
   Sea como fuere, como digo al principio, las obras de excavación han puesto al descubierto lo que de verdad albergaban: Canto rodado (cascajo), y cantidades ingentes de agua. Y es que ese terreno es una parte del río, que se explotó siempre como ribera, con la plantación de choperas.

En busca del camino perdido.

   Ahora que está para acabarse el año, me parece procedente comunicaros lo que he estado presenciando durante todo el verano.
   Resulta que algunos najerinos (pienso yo que tuvo que ser así), considerando que en “Año Santo Compostelano”, se puede hacer un buen negocio con los peregrinos, cogieron y pintaron en la calzada de la Calle Camino de Tricio una raya indicativa, desviándolos hacia la Guindalera (allí hay bares, cafeterías, tiendas, supermercado), en lugar de dejarlos seguir en línea recta hacia el Albergue, o hacia Alesanco. Esto, con ser pintoresco, puede parecer hasta normal. Lo malo es que los pobres peregrinos, más desorientados que “Tarzán” en una tienda de corbatas, andaban como locos, de la Guindalera al Cuartel de la Guardia Civil; del Cuartel de la Guardia Civil, a la Guindalera, con los pies destrozados y las pesadísimas mochilas al hombro, hasta que aparecíamos por allí alguna alma caritativa o yo, repartiendo las cartas, e intentando barnizar un poco la putada, les indicábamos que en línea recta se les haría el camino menos largo.
   Esto, aunque pueda pareceros una pijada, o una trastada menor, os juro que fue para ellos un contratiempo de marca mayor. Por eso, porque quiero que quede constancia de él, me he decidido a colgároslo hoy.

martes, 23 de noviembre de 2010

Que veinticinco árboles no son nada.

   Esto es lo que deben pensar nuestra ínclita alcaldesa y su Presidente, porque aquellos veinticinco árboles de gran porte que, ayudados por correligionarios suyos y algunos de sus niños, “colocaron” en la rotonda del Paseo, para conmemorar el “25 Aniversario del Estatuto de La Rioja”, han sido mandados a tomar por el saco. Y eso que fueron “colocados” en honor a todos los políticos que hicieron posible el Estatuto de La Rioja, e iban a formar, junto con el monolito y el olivo, el “Bosque del Estatuto”.
   En aquella magna plantación, el Presidente de nuestra ínclita alcaldesa, henchido de orgullo y pundonor, les dijo a los concurrentes: “Colocar un árbol es colocar esperanza, porque tiene vida. Se hunde en las raíces de nuestra región, y se alimenta de lo que es propio de nuestra tierra. Y eso va a justificar y dar el fruto de la calidad de vida y bienestar del pueblo riojano. Por lo tanto, lo que hacemos hoy en Nájera con estos árboles, es mirarnos a nosotros mismos; profundizar en lo que tenemos, y valorar y sacar lo mejor de nuestra tierra”. Y os juro por mis muertos más frescos, cantores míos, que esto no es cosa mía. Que fue el mismísimo Pedro Sanz quien lo dijo. ¿Convocarán ahora a los medios de comunicación, a sus correligionarios y a sus niños, para decirles y decirnos, que veinticinco árboles no son nada, y que qué coño más da la frustración que puedan sentir los niños, por haberles roto sus sueños?

lunes, 22 de noviembre de 2010

Saltar a la soga.

   Hace unos días, mientras repartía el correo, me di de bruces con unas madres que estaban enseñándoles a sus hijas a saltar a la soga. Y fue tal mi alegría (no porque le estuvieran llevando la contraria a las femachistas de los colegios, mal pensados), que sin darme cuenta me vi yo en la Plaza de España, saltando con una falange de niños.
   A este entrañable juego, jugábamos niños y niñas, juntos y revueltos, sin límite numérico alguno, y consistía en ir saltando todos los que no la quedaban (los que la quedaban eran los encargados de dar), hasta que alguno de nosotros parara la soga, la pisara o se la llevara con el culo o con las piernas, que era hacer mala. Cuando esto le ocurría a una chica, nos poníamos contentísimos los chicos, porque por lo común, al pegarle la soga en el culo, le levantaba el vestido y le veíamos las bragas. (Había que estar a todo, amigos míos)
   Al saltar, normalmente lo hacíamos de uno en uno, aunque en ocasiones saltábamos hasta de cinco en cinco, y lo hacíamos al compás de canciones típicas de este juego, como las siguientes: “Una, dos y tres/ pluma tintero y papel/ para escribirle una carta/ a mi querido Miguel/, que está malito en la cama/, los días de la semana/: Lunes, martes, miércoles, jueves, viernes, sábado y domingo/”. “A la una/ a las dos/ a las tres de la mañana/, se levanta/ el panadero/ a hacer la primera hornada/.” “Cuando venga el cartero/ qué cartas traerá/, triga las que traiga/ se recibirán/”. “El nombre de María/, que cinco letras tiene/: Que la M/ que la A/ que la R/ que la I/ que la A/: Maaaaríííía/”. “Mamá/ mamá/ de cuántos añitos me voy a casar/: De uno/, de dos/, de tres/ (y así hasta que alguien hacía mala)”. “Al pasar la barca/ me dijo el barquero/, las niñas bonitas/ no pagan dinero/”. “No hay en España, leré/ puente colgante, leré/ más elegante, leré/ que el de Bilbao/ riau/ riau/”. “Soy la reina de los mares/ y ustedes lo van a ver/ tiro mi pañuelo al agua/ y lo vuelvo a recoger/”. Hasta que íbamos haciendo mala y nos poníamos a dar.
   A la soga se saltaba de varias modalidades más, como al “chorizo”,  que consistía en darle rapidísimo a la soga. Otro era el de saltar y agacharte, para que los que daban elevaran la soga. El típico de saltar de una, de dos, de tres… El de ir girando la soga a ras de suelo mientras todos a la vez la sorteaban, y el de cuando el dueño de la soga se enfadaba y jugaba solamente con otro (que se jodan los demás) al “Que entre/ que entre/ la hija del rey/ que se llama Isabel/”. Y a lo mejor iba Fernando, David o Daniel, y entraban como si así se llamaran, hasta que el de la soga les cantaba/: “Que salga/ que salga/ la hija del rey/ que se llama Isabel/”: Y más contentos que chupín, iban y salían Fernando, David o Daniel.
   Y he de deciros, cantores míos, que este y otros muchos juegos están publicados en mi libro, “Recuerdos de infancia”.

domingo, 21 de noviembre de 2010

Hagamos un último esfuerzo.

   Queridos cantores míos. Quiero pediros de todo corazón, que hagáis un último esfuerzo, y rebusquéis una vez más en el baúl de los recuerdos, para coger todo aquello de lo que ya no vayáis a hacer uso, y lo llevéis el próximo miércoles a la Casa de Cultura, para colaborar con nuestra compañera cantora, Gloria Martínez, que se merece todo de nosotros. Ya sabéis, y si no os lo recuerdo ahora yo, que podéis llevar libros, juguetes, menaje, adornos, ropa y objetos nuevos o seminuevos. Que nadie pueda decir nunca que sólo componemos canciones protesta; que vean que también somos capaces de componer las mejores baladas de amor. Espero que lo demostremos, colaborando todos en tan loable labor.

sábado, 20 de noviembre de 2010

¿Es que no aprenderemos nunca?

   Con el suceso tan triste y desgarrador que ocurrió en nuestra ciudad, parece mentira que algunos jóvenes sigan usando como zapatero particular los cables de alta tensión. Existen bromas graciosas, ingeniosas, grandilocuentes, pero el hacer eso con las deportivas… ¡maldita la gracia que tiene!

División de opiniones.

   Esto es lo que existe entre los vecinos de la Calle Avenida de La Rioja, con las obras de parcheo. Unos dicen que mira qué bien. Que así no pagan dinero. Pero otros, empero, además de haber acudido iracundos a pedir explicaciones al Ayuntamiento, dicen sin cortarse un pelo, que esto es una vergüenza. Que no hay derecho a que el Ayuntamiento vaya a gastarse mil millones de las antiguas pesetas en una Piscina Cubierta en el Paseo, y tenga la desvergüenza de, en vez de hacer la Calle nueva y como Dios manda, haber ordenado a la Brigada de obras hacer esta chapuza de parcheo.

viernes, 19 de noviembre de 2010

Huerto solidario.

   Muchas han sido las veces que he estado tentado de registrar un escrito en el Ayuntamiento de Nájera, solicitándoles a nuestros gobernantes que nos fuera concedida  la Plaza de España a los ecologistas, para crear en ella un vivero en el que cultivar encinas, robles, hayas y otras especies autóctonas, para repoblar con ellas todas las zonas desérticas que existen en los alrededores de la ciudad, con la certeza de que nada más leerlo, todos ellos, absolutamente todos, iban a echarse las manos a la cabeza, gritando al unísono: ¡Éste hombre está loco! Y no les faltaría razón.
   Sin embargo, cuando sin escritos ni formalidades, entre plato y plato, o copa y copa (igual me da que se me da), otros colectivos o sujetos de varias especies, les dejan caer en restaurantes o bares, así, como el que no quiere la cosa, que les vendría muy bien construir en el Paseo (esa Maravilla Natural que muy pronto perderemos), no sólo no se echan las manos a la cabeza mientras les llaman locos al unísono, sino que, encantados, se brindan a trabajar con la mayor de las solicitudes en ello.
   Hallábame hace unos días reflexionando sobre este despropósito, o toque de atención, pues de haberlo llevado a cabo, les juro a ustedes, amigos lectores, que hubiese sido sólo para eso, para ver si de una vez por todas se les hace la luz a estos sujetos, y se dan cuenta de que tan descabellado es lo uno como lo otro, cuando me vino a la memoria el folleto del que les hablé en la última “Crónica de Nájera”, ese que buzonearon el pasado verano, con el título de “Seguimos cumpliendo en Nájera”, y recordé que, tal y como les adelanté, observé en él una clamorosa ausencia: “El Colegio San Fernando”. Esa obra que tan necesaria y vital era hace seis años. Ese Centro de Enseñanza que si no se construía con inmediatez absoluta, parecía ser que todos los najerinos nos íbamos a volver tontos o lelos. Ese flamante edificio por el que iban a trabajar sin regatear esfuerzos, para tenerlo construido e inaugurado ya hace cuatro años, por el bien de nuestros futuros mozos.
   Y atando cabos (una cosa lleva a la otra), llegué a la conclusión de que como no lo van a construir en un montón de años (parece ser que el único motivo de cambiarlo de sitio era la inclinación que tenían los álamos centenarios del Paseo que a traición se cargaron este verano), pensé que quizá no sería mala idea el que estos sujetos que dicen gobernarnos tan eficazmente, les dejaran la explanada de la Calle Canalón, donde iba a ir ubicado el Colegio San Fernando, sin renta alguna, a los cientos de najerinos que ahora mismo se encuentran en serios apuros por estar en el paro, bien arada, abonada y preparada, y con los aperos de labranza imprescindibles para su perfecto mantenimiento, para que creen allí un gran “huerto solidario” en el que poder cultivar con sus propias manos toda clase de frutas, hortalizas y legumbres, con las que poder ayudar en sus casas a ahorrar unos pocos euros en la bolsa de la compra.
   Y así, además de comprobar que efectivamente se preocupan por el bienestar de todos los najerinos, tal y como declara hasta la saciedad nuestra alcaldesa, en cuanto los de la prensa conectan una grabadora o le ponen un micrófono en la boca, los parados recuperarían su autoestima ejerciendo tan noble oficio, y volverían a sentirse personas.

¡Que no se apuren los parados!

   Los parados de la comarca de Nájera ya pueden dormir tranquilos, gracias a una iniciativa del Servicio Riojano de Empleo, que ha desplazado hasta nuestra ciudad a dos de sus responsables, a enseñarles cómo conseguir trabajo en el menor tiempo posible.
   Para ello, cientos de parados han sido citados estos días en la Sala de Usos Múltiples del Cine Doga, con cabida para unos cincuenta, para pedirles que elaboren un currículum, al que posteriormente dedicarán ellos unos diez segundos (esta gente trabaja lo que trabaja, y no da para más), en el que tienen que plasmar algo reseñable.
   Y ¡claro!, el personal se quedó totalmente mosqueado. Porque para ese viaje, no hacían falta tantas alforjas. Pero digo yo, ¡que sí! Que sí pueden aprovechar la ocasión, sobre todo mis contemporáneos, poniendo en el currículum que tienen 56, 57, 58, 59 años. O sea, que tienen cincuenta y tantos millones de razones para no ser contratados. ¡No me diréis que eso no se lee en diez segundos, y es, además, muy reseñable! ¡Pues eso! ¡Que descansen tranquilos!
   Y, al hilo de esto, me vais a permitir, cantores míos, que os cuelgue un artículo que publiqué en la "Crónica de Nájera", que viene como anillo al dedo.

jueves, 18 de noviembre de 2010

Acceso terapéutico.

   A tenor de cómo solucionaron el acceso a la Ribera del Najerilla, el Arquitecto Redactor del Proyecto del nuevo Puente, no sólo fue católico, apostólico y romano, sino que además fue adivino. Este señor adivinó que en la actualidad iba a haber muchos hombres en el paro, y que esa desgracia o tragedia, iba a aumentar considerablemente el índice de  divorcios. Ante semejante perspectiva, se dijo para sus adentros: “Construyo las escaleras de acceso al río sin rampa, y así, como los matrimonios van a estar todo el día juntos, para que no se agobien ni riñan, las mando a ellas por la Calle Mayor, con el cochecito del niño, a que vean los escaparates de las tiendas, y a ellos por las escaleras, para que, mientras llegan sus mujeres, hablen con sus amigos, a la vez que se toman una cerveza. Y de ese modo, las tengo a ellas, contentas; a los comercios, contentísimos; a ellos, felices; a los bares, ¡para qué te voy a contar!, y al resto de los najerinos, comiendo perdices, ebrios de felicidad.”
   Y mira por dónde, acertó. ¡Si señor; así se construyen Puentes!

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Falacias, y daños colaterales.

   Nuestra conspicua alcaldesa, ajena al bochornoso espectáculo que montó el pasado domingo, día 14, con motivo de la inauguración de lo que iba a ser una Pasarela, y ahora es un Puente, ha ordenado buzonear por todo Nájera un panfleto en el que dice cosas tan ciertas como éstas: “El nuevo “Puente de los Pescadores”, bautizado así en homenaje a los pescadores del Najerilla, el río truchero por excelencia de nuestra Comunidad”. “Con este nuevo Puente sobre el Najerilla, el cuarto, Nájera integra aún más a su río en la vida de la ciudad”. “El nombre con el que se bautiza a esta pasarela (aquí ya, ni es puente, ni lleva mayúscula), un merecido homenaje a la tradición pescadora de los najerinos y su ancestral respeto por su río”.
   Bueno, pues soslayando el hecho de que despreció vilmente a la Agrupación Musical Najerense, a la que había ordenado tocar tres piezas, mientras ellos se pavoneaban con los fotógrafos, levantando la banderita de La Rioja, yéndose a todo meter, sin terminar la primera y única, con su presidente, para enseñarle orgullosa los estragos que había hecho en su amado y respetado río, hoy mismo, a las cuatro de la tarde nos hemos visto obligados a llamar a los Guardas Forestales, porque ya estaban cargándose el sotobosque de ribera que nuestro maltratado río ha creado en la zona de la Pirámide.
   No sólo ha masacrado el mejor vivero de truchas del Najerilla, sino que se ha cargado el “corredor ecológico”, y ahora quiere cargarse el mayor y más rico ecosistema de todo el Najerilla, importándole un par de ovarios, lo que sea de la flora y la fauna. Y es que claro, ahora, como sabe que encima ha construido una pasarela muy baja, le estorban todas las mimbreras del Najerilla, desde Nájera, hasta Mansilla.

Monolito del Paseo de San Julián.

   A pesar de haber estado jugando en él durante toda mi niñez y parte de mi mocedad, jamás reparé, mientras saltaba por encima de él una y otra vez, en qué podría significar esa piedra tan cautivadora y curiosa, hundida en un costado del otrora majestuoso Paseo de San Julián.
   Hoy, cada vez que veo ese monolito, me pregunto si en su inscripción primigenia revelaría el misterio de su inclusión en dicho Paseo. Y casi siempre llego a la triste conclusión (pongo triste porque ya no puede leerse), de que ese podría ser un documento notarial de la protección absoluta del Paseo. Y si esto fuera así, vendría a resultar que nuestros ínclitos gobernantes, están violando una vez más las leyes.
   Es una verdadera lástima no saberlo a ciencia cierta, para poder agarrarnos a ello, y poder parar así, con la Ley en la mano, a esta caterva de energúmenos. Por ello, si alguien de Amigos de la Historia Najerillense, o cualquier Historiador, lo conoce, le ruego encarecidamente que nos lo comunique, antes de que esta Maravilla Natural, desaparezca para  siempre, de nuestra ciudad y de nuestras mentes.

martes, 16 de noviembre de 2010

Comienza la masacre.

    Para que todos los cantamañanas que decían por doquier, que la señorita alcaldesa nunca iba a talar un árbol del Paseo, silencien para siempre su horrísono canto, los encargados de llevar a cabo la masacre, ya han comenzado. Ahora que me explique a mí, la cantamañanas mayor del reino, cómo coño va a haber más árboles en el Paseo, si de un plumazo se va a cargar un centenar de álamos blancos. En las distintas ocasiones en que esta cantamañanas se ha dirigido a los ciudadanos, ha repetido hasta la saciedad: "No hagáis caso de lo que digan los ecologistas. El Paseo va a estar mucho más verde y poblado cuando llevemos las obras a cabo". Pues desde este blog cantor, exijo que esta incendiaria de cuello blanco, le explique claramente al pueblo, cómo en un terreno de cien mil metros cuadrados de arbolado, metiendo cuarenta mil de hormigón, puede haber más arbolado. Que lo explique bien explicado, porque yo llevo meses dándole vueltas, y aún no lo he averiguado.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Traslado de la Concejalía de Cultura.

   Hace muy pocos días, se produjo en nuestra ciudad un hecho que no deja de ser curioso. Se trata del traslado de la Concejalía de Cultura, del Ayuntamiento de Nájera, al Hogar de las Personas Mayores. Y uno no sabe muy bien, si este traslado obedece a que a nuestros ilustres gobernantes les ha entrado la vena rajoyniana y quieren deshacerse de todo que huela a catalán-división de España; a que tiene tanto trabajo la titular de dicha concejalía, que necesita toda una planta para ella, o a que se aproximan las elecciones locales y autonómicas, y quieren tener a una concejal en dicho Hogar, lavándoles el cerebro a nuestros mayores, con aquello de: “¡Zapatero os ha congelado las pensiones! ¡Castigadlo en las urnas!”
   Sea como fuere, yo sigo en la mía: ¡Que no deja de ser curioso este cambio de concejalía

domingo, 14 de noviembre de 2010

Mejor imposible.

    ¡Ni el mismísimo Franco lo hubiera hecho mejor! Nuestra conspicua alcaldesa, junto con su amadísimo Presidente, Pedro Sánz, inauguró en la tarde del domingo 14 de noviembre (¿por qué no lo haría el 20?) la nueva Pasarela peatonal, bautizada como todos vosotros sabéis, cantores míos, como "Puente de los pescadores" (será para tenerlos tranquilos después de la masacre que ha cometido en el río), con la Banda de Música Municipal, animando el evento, y con una docena de piragüistas, que, por si las pocas truchas que hayan quedado, se pensaban que ya podían respirar tranquilas, han descendido el río, entre aclamaciones del respetable (¡claro, con el día que hacía, qué otra cosa podía hacer, que el ir a ver cómo nuestros ilustrísimos hacían el paripé!), dándose a continuación un baño de multitudes, mientras recorrían, departiendo amigablemente, el trayecto que une, ¡con horquillas y todo!, los dos puentes: el de Piedra y el de los Pescadores.
   En el acto de inauguración, hecho a toda prisa porque llovía y se les iban a mojar los trajes, Pedro Sánz nos dijo a los reporteros gráficos: "¡Sacadnos bien, que éste va a ser un día histórico" (ahora va a resultar que le quieren quitar el protagonismo hasta al mismísimo Caudillo). Y yo le contesté: "Señor Presidente, ¿qué opina usted del Blog "si se calla el cantor?" Y va, y se pone a mirar para otro sitio, mientras la alcaldesa dijo para sus adentros: "¡pues lo que es a mí, como no me saques el culo!", y se me volvió, tal y como demuestra la foto.

sábado, 13 de noviembre de 2010

¿Otro error histórico?

   Si la Calle Costanilla se llamó hasta hace muy pocos años “Calle del Puente arriba”, de la casa de la familia de la alcaldesa hacia la Salera; y “Calle del Puente abajo”, de la misma casa, hacia la Calle las Viudas, es evidente que en lo que hoy es la casa de la alcaldesa, hubo un puente; y además, según los documentos fotográficos existentes, con tres pilares cilíndricos. Sobre dicho puente, existe ya documentación municipal, en el año 1.800, en la que se prohíbe taxativamente el tirarse de él (y no del de piedra como cree la gente) para matarse. Igualmente, existe también documentación actual, en la que el Arquitecto redactor del Plan Municipal de Nájera, proponía en el año 2004, a través del texto refundido, que el edificio de la familia de la alcaldesa quedara “fuera de ordenación”, no sé si para reparar un “error urbanístico” (la oportunidad era única), o para qué. Lo que sí sé, es que nuestra proba alcaldesa, subsanó como “error” dicha proposición, en un Pleno Extraordinario y Urgente, celebrado el 13 de abril, de 2.005, a todo correr, para poder llevar a cabo la construcción de su nueva vivienda. Viendo la fotografía que acompaña esta información, no hace falta ser un lince para comprobar que el pilar que falta, se encontraba justo donde actualmente se está construyendo la alcaldesa su casa. Por lo que es fácil deducir, que tanto la casa vieja de su familia como la que había al lado, la de los polacos, eran postizas. Es decir, que estarían ahí, como mucho hace ciento cincuenta años. O quizás menos. Porque yo tengo oído que en los años mozos de mi difunto padre, los camioncitos que había en nuestra ciudad para transportar muebles, principalmente, cuando tenían que subir a cargar a las carpinterías que había hacia mitad de la cuesta, se las veían y se  las deseaban para poder pasar por donde estuvo el puente, ya que cabían justitos.
   Consiguientemente, aunque nuestra proba alcaldesa sabe a ciencia cierta que en la Administración existen dos temas tabúes: “Meterse con el poder”, y “menear todo aquello que pueda acarrear complicaciones”, se cubre las espaldas haciendo uso del poder que los najerinos en las urnas le otorgaron, y… ¡palante! ¡Que le quiten lo enladrillado!

viernes, 12 de noviembre de 2010

Una proposición indecente.




Eso es lo que uno puede pensar, cuando lee que quien ha convertido nuestra ciudad en una auténtica sentina, pide a las Asociaciones najerinas que promocionen nuestros valores: Históricos, Paisajísticos, Patrimoniales, Ecológicos…, que ellos ya les apoyarán con dinero.
   ¿Pero no se les caerá la cara de vergüenza a estos badulaques al proponer semejante tarea, después de haber perseguido de un modo inmisericorde a muchas de las Asociaciones de nuestra ciudad, hasta dejarlas casi extintas, y de haber arrasado de manera analfabeta y vergonzosa las últimas referencias que aún quedaban de la otrora gloriosa y esplendorosa ciudad de Nájera?
   ¿Es que van a seguir durante años, haciendo como si aquí no ocurriera nada; como si estuvieran siendo respetuosos y ecuánimes en sus decisiones y acciones? ¿Cuándo van a tener un poco de vergüenza torera, y van a dejar de intentar mancillar la poca honra que aún nos queda? ¡Basta ya, caterva de imbéciles!

jueves, 11 de noviembre de 2010

¡Sí, hemos perdido el norte!

   Hace pocos días, como consecuencia de una noticia oída en televisión, sobre la prohibición de que las chicas jugaran a la soga en los Colegios, en las horas de recreo, me preguntaba y os preguntaba, si estábamos perdiendo el norte. Hoy ya sé la contestación: ¡Sí! Y ha vuelto a ser la televisión la que me lo ha confirmado. Hace unas semanas, los pobrecitos dueños de los Casinos de este País, tan famélicos ellos, presionaron al gobierno de no sé qué Comunidad, para que prohibiera jugar al bingo en los Hogares de la Tercera Edad, porque les hacían la competencia. Y dicho gobierno, atendiendo siempre al débil contra el poderoso, cerró varios de ellos, y apercibió a otros tantos, a pesar de que la recaudación máxima de la venta de cartones, comprobada judicialmente, ascendía a la astronómica cifra de cinco euros.
   Nuestros pobres abuelos, sin salir aún de la estupefacción que les produjo acto tan abyecto, alegaron y…ganaron.
   Ahora resulta, que tampoco pueden jugarse cinco céntimos a la brisca o al tute, porque también están dañando la buena marcha de la economía nacional, con una competencia desleal tan descomunal.
   No sé cómo acabará el tema (me imagino que nuestros abuelos lo volverán a ganar), pero ¿os imagináis que hubiesen venido aquí, en los maravillosos tiempos de mi infancia, las fuerzas represoras del País, a prohibirles a la “Perpe” y compañía, que se jugaran la perra chica a la brisca, en las mesas camilla? Decididamente… ¡Hemos perdido el norte!

Bailando con lobos.

   Cuando uno lleva ya veintitantos años metido en el mundo del ecologismo, intentando, entre otras muchas cosas, preservar por todos los medios un trocito del paraíso que heredó de sus antepasados, para poder legárselo a sus nietos, llega un momento en el que se cansa, no tanto del desprecio y de la incomprensión de su gente, que al fin y al cabo siempre contó con ello, cuanto de que desde la propia Administración, que debería ser su fuerza y su aliento, sea tratado como un auténtico necio.
   Este extenso proemio, nace como consecuencia de la denuncia que el 25 de Noviembre de 2005 interpuse en varias Administraciones contra el Ayuntamiento, por meter una pala mecánica en el río Najerilla, sin cumplir los requisitos que se le habían exigido para ello.
   Y es que después de tres meses largos sin tener noticias de mi denuncia, haciendo uso de un derecho constitucional, el 17 de Marzo de 2006, volví a presentar otra en las mismas Administraciones, esta vez de MORA, para obligarlas por Ley a que me contestaran o, en su defecto, poder llevarlas a los Tribunales.
   Y viene a resultar que el día 7 de Abril de 2006, recibí en Correos la respuesta del Director General del Medio Natural de La Rioja, Miguel Urbiola Antón, en la que me decía, me consta que sin cortarse un pelo, “que la Ley de Procedimiento Administrativo de 17 de Julio de 1958, fue sustituida por la Ley 30/1992, de 26 de Febrero, de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común. Y que para la Administración de la Comunidad Autónoma de La Rioja, es también de aplicación la Ley 4/2005, de 1 de Junio, de funcionamiento y régimen jurídico de la Administración de la Comunidad Autónoma de La Rioja”. Y yo, que soy un estulto, voy y no lo adivino en todo este tiempo.
   Después, para no extendernos en demasía (pongo la carta a disposición de quien quiera leerla), viene a decirme “que los denunciantes ya no somos parte interesada en la denuncia, y que no tenemos más participación en el proceso que el derecho a recibir comunicación del órgano competente sobre la apertura o no del procedimiento”. Y a mí, ¿cuándo pensaba dármela?
   Continúa diciéndome “que todo estaba en regla; que los trabajos se hicieron bajo la supervisión de personal de su Dirección General, a partir de las dos horas de su comienzo; que se cumplieron las condiciones impuestas, y que se mantendrá el paso de nutrias y visones, puesto que la vegetación podada se regenerará naturalmente la próxima primavera, y que tampoco existió afección a la fauna piscícola, ya que no se produjo el dragado del cauce.”
   Y termina haciéndome saber que “esa Dirección General entiende que no existe infracción administrativa, por lo que con esta fecha se procede al archivo de las denuncias presentadas.” O sea, que no tengo derecho, pero sí. Que si no denuncio la MORA no se hubiese archivado nunca.  Que si no te enteras, usebín... ¡Esto es un puñetero cachondeo!
   A ver si se enteran también el Profesor y los Alumnos de “Ciencias de La Tierra”, del IES “Esteban Manuel de Villegas”, de Nájera, de que no le pasó nada a la Flora y a la Fauna del río Najerilla. Que ni se dragó, ni se removieron los lechos fluviales, ni se arrasó la vegetación. Que no anduvieron las palas mecánicas por el río. Que sólo se podó la vegetación, y que los visones y las nutrias volverán como las oscuras golondrinas de Bécquer. Que no os enteráis de nada. Que en Nájera existe mucha afición a trucar, no sólo las fotos, sino las pupilas de los ojos, y luego veis a colores lo que no existe ni en blanco y negro...
   Por favor, señor Urbiola, dilapide usted el dinero que desde Bruselas le envían para la recuperación de los ríos. Condone usted todas las denuncias que pongamos contra los caciques de los pueblos. Haga usted en su Administración todo aquello que le pida el cuerpo. Pero no nos tenga por tontos. Que los que lllevamos tantos años tratando con gente como usted, de sobra sabemos que somos corderos bailando con lobos.
                  

miércoles, 10 de noviembre de 2010

¡A quién se le ocurre!

   ¡A quién se le ocurre osar llevarle la contraria a la proba alcaldesa, en vísperas de venir a visitarla su probo presidente! ¡Pardiez! Seguro que el Guarda Forestal que, cumpliendo con su deber, fue a parar a la Brigada de Obras del Ayuntamiento de Nájera, cuando ésta estaba dejando el río como un trigal recién cosechado, desconoce dos cosas fundamentales en este pueblo. A saber, que aquí nunca hay que cumplir con tu deber (“atontao”), porque cumplir la ley acarrea problemas; retrasa las obras, y entorpece el normal desarrollo de la ciudad, (“manduca”). Y que lo que genera el río (“panoli”), no es flora, vegetación, yerba, bosque, sotobosque o como lo queráis llamar los Guardas Forestales y los impresentables de los ecologistas, ¡eso es MIERDA! Y la mierda hay que quitarla a todo correr cuando un presidente como el de ellos va a venir a inaugurar un puente, que, de no saber, como sabemos, que está en nuestra ciudad, podría ser el de cualquier circunvalación o autopista: Que es como tiene que estar todo dentro del casco urbano: Aséptico y funcional.
   Así que, en lo sucesivo, señor Guarda Forestal, cuando vea a la Brigada de Obras descojonando el río, váyase a tomar un café o por el c…, y así se evitará el que tengan que ir a por usted una caterva de energúmenos, como le ocurrió el martes pasado, que no faltaba allí ni el apuntador.
   Y si por si acaso alguien no lo pilla, decirle que el martes pasado, cuando ocurrió lo ya relatado, la alcaldesa, el primer teniente de alcalde, varios concejales, el aparejador y la madre que me parió, acorralaron al más puro estilo gansteril, al pobre forestal, por cumplir con su obligación.

El día más hermoso. (Y 3)

   Ruidosa chiquillería llenaba la Pastelería Gasco, en demanda de los exquisitos merengues de a peseta la unidad, que en grandes bandejas plateadas preparaba el popular Donato.
   Y de las tiendas de ultramarinos de José Izquierdo y de la señora Marciana, salían presurosas algunas mujeres, con los rulos puestos en la cabeza y el mandil recogido sobre una mano, que a última hora se habían dado cuenta de que habían olvidado algo muy necesario cuando hicieron los recados.
   En el río Najerilla, cantidad de najerinos y “bilbainos” (En aquella época todos los veraneantes eran vascos, y se les llamaba así, como suena), se bañaban incansablemente en los grandes pozos de aguas frías y cristalinas que, a finales del invierno habían dejado las terribles crecidas, gozándola como niños, emulando a “Tarzán”, tirándose al agua de cualquier manera: de culo; a la bomba; de pie; al paquete; al ángel o de cabeza, desde los añosos árboles que poblaban la ribera: Mimbreras, chopos y álamos blancos.
   Todo, en suma, venía a corroborar que aquel era un día increíblemente hermoso. No obstante, y a pesar de percibirlo así en todos y cada uno de sus poros, Benedicto, además de no entender cómo era posible que él fuera testigo directo de todo ello, percibía lejanamente unos como lastimeros lamentos, a la vez que notaba vagamente cómo de sus humedecidos ojos verdes caía de cuando en cuando alguna lágrima, que lentamente resbalaba por su bondadoso rostro.
   Sin parase a meditar sobre ello, se dispuso a disfrutar nuevamente de aquella especie de ensueño, siguiendo su cautivador recorrido por los distintos rincones de su ciudad, conocida como Nájera en el mundo entero. Pero cuando más feliz se encontraba, viviendo de nuevo ese día tan increíblemente hermoso, unas extrañas convulsiones recorrieron todo su cuerpo, sobresaltándolo violentamente, y, confundido y perplejo, abrió muy lentamente sus pesados y dolorosos ojos, y vio que su familia rodeaba, compungida, su humilde lecho.
   Durante unos segundos escuchó lejanamente rezos mezclados con dolorosos y sinceros lamentos, apenas perceptibles para sus ya desgastados oídos; olió algo parecido a incienso, y sintió que una tibia lluvia mojaba su rostro. Súbitamente, todo se tornó gris para él, cuando la amorosa mano de su hermana Carmen, la única que aún queda viva de todos sus hermanos, cerraba lentamente, y para siempre, sus verdes ojos.
   Era un día increíblemente hermoso, en el que miles de ruidosos vencejos surcaban incansable y acrobáticamente un cielo infinitamente azul, cuando la Parca liberó el Alma de un bello Serafín, de un vetusto, torpe y cansado cuerpo. 

                           “A mi bienamado padre que está en el Cielo.”

martes, 9 de noviembre de 2010

El día más hermoso. (2)

   Salvador Fernández prensaba con cariño las pieles de cordero y de oveja, que previamente a la intemperie había secado, atándolas con fuertes sogas, para hacer con ellas gigantescos fardos.
   Los autobuses de Guinea y Angulo recogían y dejaban incesantemente viajeros en la Parada de la Ribera del Najerilla, y amontonaban de cualquier manera, recostados sobre la barandilla del Puente de Piedra, cantidad de paquetería que más tarde repartirían los señores Valentín y Alfonso, en sus carritos de ruedas de goma, por los comercios y tiendas diseminadas por todos y cada uno de los barrios.
   Del almacén del señor Julián, “el navarro”, salían sin cesar cantidad de barcas de naranjas y de ramos de plátanos, que los señores Sixto y “Ogueta”, transportaban en pequeñas y chirriantes carretillas, mientras que de la fábrica de gaseosas del señor Eusebio, “el Jovito”, lo hacían cajas de gaseosas y barras de hielo, transportadas por “Bernal” y el “campiñarri” en pequeños carros de mano.
   Los dueños de los Restaurantes “Las Pericas” y “Palacios”, se afanaban en preparar exquisitos platos riojanos y en poner, como Dios manda, las mesas, para que sus clientes habituales encontraran todo de perlas cuando fueran llegando.
   El señor Isidro Hernáez y su esposa, Eufrasia Iguea, despachaban toda clase de alimentos en la pequeña tienda de comestibles que tenían montada en el portalón de su casa, en el Arrabal de La Estrella; mientras Eusebio, que estaba de guardia en el surtidor de gasolina que su bienamado padre Benedicto tenía junto al restaurante “Las Pericas”, esperaba a que le pusieran el gigantesco bocadillo de mortadela, para zampárselo en un abrir y cerrar de ojos, sentado en la banca de madera que tenían colocada contra la fachada de dicho  Restaurante, mientras esperaba cómoda y pacientemente a que vinieran a repostar los Seat, “seiscientos”, “ochocientos cincuenta” y “mil quinientos”; los “Gordinis”; los “Sinca mil”, y los entrañables “dos caballos”.
   En el bar Chule Chimi, el querido y recordado por todos los najerinos, Paquito Valderrama, conocido popularmente como “el legionario”, mantenía interminables conversaciones consigo mismo, a través del gran espejo que en la parte central del bar tenían colocado, mientras que Eloy, “el vagabundo”, se quemaba las barbas con un mechero de gasolina, y los taxistas la gozaban como enanos viendo reñir y hacer las paces, en escasos segundos, a sus compañeros Matías, “Chinfú” y Antonio, “Gabardinón”, por encerronas que picarescamente les preparaban ellos mismos. Principalmente “los sorianos”.

lunes, 8 de noviembre de 2010

El día más hermoso. (1)

   Queridos Amigos cantores, me voy a permitir la licencia de colgar un escrito muy especial para mí, pero que considero muy importante para vosotros, ya que en él reflejo la muchísima vida que tenía un pedacito de nuestro pueblo. Como quiera que el escrito es largo, os lo voy a colgar durante tres días, lunes, martes y miércoles, para que no se os haga denso. Deseo de todo corazón que os guste, y que despierte lo mejor que hay en vosotros.
   Era un día increíblemente hermoso. Bajo un cielo infinitamente azul, cientos de ruidosos vencejos sobrevolaban acrobáticamente los tejados de las casas adyacentes a la Real Parroquia de Santa Cruz, mientras un batallón de niños desarrapados jugaba al punto en sus paredes laterales, causando aún muchísimo más estrépito que ellos.
   A pocos metros de allí, en las inmediaciones de la Plaza de La Estrella, cantidades ingentes de najerinos y moradores de los pueblos vecinos se disponían a llevar felizmente a cabo sus diferentes cometidos.
   Los operarios de Coloniales Preciado, no paraban de llenar botellas de aceite de los bidones de doscientos litros que para tal menester tenían allí almacenados; de pesar en bolsas de papel marrón, azúcar, caparrones, alubias, lentejas y garbanzos, de los que guardaban en grandes sacos de cuerda hábilmente amontonados; de despachar galletas, chocolate, latas de sardinas, chicharro y soldados; de trocear con un gigantesco cuchillo exquisito bacalao seco y, en suma, de servir amable y eficazmente todo aquello que les pidieran sus devotos parroquianos.
   En el Bar Royalty, los padres y hermanos del entrañable “chamaco”, servían sin cesar humeantes y aromáticos cafés, solos, con leche, cortados y descafeinados, además de sabrosísimos cucuruchos de artesanal helado.
   Los guarnicioneros, José Barquín y Manuel Hidalgo, cosían febrilmente alforjas, cinchas, albardas y demás útiles del ganado, mientras el señor Luís “el herrador”, se encargaba de ponerles a los brutos nuevos los zapatos.
   El señor Matías, y Miguel Ángel Yécora, cortaban el pelo y ponían inyecciones respectivamente, en un pequeño habitáculo.
   Del Hotel Campana salían, de cuando en cuando, viajantes que la noche anterior habían pernoctado allí, para visitar las diferentes tiendas, comercios y mercados, perfectamente trajeados y repeinados, y con dos grandes maletas en las manos.