jueves, 6 de enero de 2011

La náusea.

   Esto ya comienza a ser nauseabundo. Es increíble que una rueda de prensa, que no fue tal, sino una reunión entre colegas anunciada a la prensa, dé tanto de sí. Las siete pijadillas que el Presidente de los populares anunció que iba a hacer en Nájera, no hubieran ocupado ni diez líneas (un ladillo, que se dice en el argot de la prensa) en cualquier periódico que se precie. Y sin embargo aquí, está ocupando páginas enteras todos los días. Hoy vuelve a aparecer el que nunca debió de llamarse “viejo Centro de Salud”, porque nunca debió desaparecer el Polideportivo Municipal, por encontrarse a escasos metros de una farmacia, para decirnos las mismas cosas, que tampoco son tales, sino meras especulaciones o conjeturas. Y a uno, cuando día tras día va encontrándose con las mismas malintencionadas noticias, comienza a subirle del estómago la náusea. Si este es el concepto que estos pancarteros, caciques y chapuceros tienen de la ética, más nos vale a todos hacernos una cura de urgencia, para que no se nos llene el estómago de úlceras. ¡Hagan el santísimo favor de dejar de llamarnos idiotas, y pónganse de una puñeterísima vez, a ganarse el sueldo que con tanto sacrificio les está pagando esta ciudad moribunda!