domingo, 13 de mayo de 2018

Tente mientras cobro.


Esto es lo que se decía en Nájera cuando yo era zarramplín, allá por los 70, y la mayoría de los trabajos consistían en hacer chapucillas en las casas viejas. Y a juzgar por lo que vemos a diario, parece ser que, cambiando el verbo de “cobrar” por el de “ganar”, es lo que se sigue diciendo en nuestro Ayuntamiento. Las cosas no se crean para abandonarlas una vez hecha la fotografía, sino para uso y disfrute de los ciudadanos de Nájera. Si se le ponen barandillas al puente del río Muelo, hay que mantenerlas, y no dejar su mantenimiento en manos de personas de buena fe, pero absolutamente inexpertas. Porque, para tenerlo como ahora mismo se encuentra, estaba mucho mejor sin ellas. Lo mismo ocurre con las que pusieron en el Paseo de San Julián para un encierro -la gente las rompe porque no le gustan- que nunca se celebró, y con algunos bancos rotos y garabateados. Esto, por no hablar de la yerba del Parque Natural, que ahora mismo no costaría nada segarla, y luego cuesta un pastizal, porque se convierte en una auténtica selva. Así que, más trabajar, y menos fotografías.

Cuerpo sano, mente sana.


“El cuerpo es nuestro jardín, la voluntad es nuestro jardinero”. -William Shakespeare-