martes, 17 de febrero de 2015

Nuevo desprendimiento de la muralla.


    Esta es la segunda vez que se desprenden medio centenar de piedras de la muralla de la primera era. La primera fue el veinte de Noviembre del pasado año, después de haber circulado por la era vehículos de gran tonelaje. Como ya sabéis -lo han publicado doscientas veces-, nuestros imaginativos gobernantes, en lugar de terminar las excavaciones y recuperar el Alcázar, para poder mostrarle al mundo entero semejante maravilla, están construyendo un corral de vacas en las eras del Castillo, para, según ellos, poner en valor las excelencias de tan emblemático lugar. Las obras han consistido, fundamentalmente, en ampliar el camino de subida al Alcázar, arreglar las escaleras; derribar los dos edificios que quedaban en pie, convirtiéndolos en “zona verde aterrazada”; conservar los muros antiguos, sustentados por jardineras hechas con traviesas de ferrocarril; recuperar el muro defensivo con una altura de dos metros; construir una escalera de acceso a la primera era, donde se hará un mirador hacia las habitaciones y los retretes de las casas de la calle San Jaime, con paneles informativos e iluminación, para que duerman mejor sus vecinos; construir otra escalera de acceso a la era superior, y, finalmente, hacer allí otro mirador con paneles informativos, farolas, bancos, papeleras y una valla de protección hecha con postes de madera tratada, con certificación medioambiental, para que los millones de visitantes que van a venir a nuestra ciudad a partir de ahora, puedan ver el desastre urbanístico que desde allí ofrecen muchos de nuestros flamantes edificios.