martes, 15 de marzo de 2022

La calima ha llegado a Nájera.

Esta mañana, cuando he salido a andar, Nájera entera estaba cubierta de barro. Coches, calles, yerba, arbustos, árboles… parecían haber sido inundados por una najerillada. Este episodio, aunque parezca excepcional, ya se ha repetido en otras ocasiones, y se debe al polvo procedente del desierto del Sahara. Como parte positiva, los sembrados presentan una imagen preciosa -han crecido dos palmos-, y los embalses se han llenado un poco gracias al agua que ha traído y va a traer -con polvo o sin polvo- estos días la borrasca Celia.