martes, 23 de agosto de 2016

Gracias, Manolo.


Por hacernos los veranos más llevaderos y gozosos con  las magníficas actuaciones que las noches de los viernes nos ofreces desde hace unos años en tu terraza. Sé mejor que nadie que esta imaginativa y generosa iniciativa tuya levanta algunas ampollas. Pero sé también que gracias a ella, además de darle vida a Nájera, trayendo a gentes de fuera, a muchísimos najerinos nos haces la semana más corta y llevadera. Parece como si nos hubieses hecho retroceder a nuestro duro despertar, cuando los que no fuimos a estudiar tuvimos que elegir entre ser carpinteros o albañiles, nada más abandonar la escuela, y la señora Victoria nos ponía películas los jueves en el Cine Villegas. Yo elegí la albañilería, y sé lo reconfortante que era ese paréntesis de los jueves para olvidarnos por unas horas de lo brutal de nuestro trabajo a una edad tan corta: Todo se hacía a pico y pala. Por eso, y por mucho más, te doy las gracias de todo corazón, y te animo a que sigas así muchos años más.