martes, 22 de febrero de 2022

Que alguien salve el Museo.

Cuando la presidenta del Gobierno de La Rioja, Concha Andreu, anunció el pasado 13 de Enero “la aportación de 2,5 millones de euros para la rehabilitación de la antigua iglesia de San Miguel para instalar allí el Museo Najerense y el Juzgado de Paz, y dedicar el actual edificio en exclusiva al Valle de la Lengua con salas de estudio y reuniones”, pensé que se trataba de un error. Mas cuando el Alcalde de Nájera, Jonás Olarte, lo corroboró días más tarde, me entró auténtico pavor. Soslayando, por prolija, la historia de la creación del Museo Histórico Arqueológico Najerillense, inaugurado por primera vez en 1980, después de dos arduos años de limpieza y acondicionamiento por parte de socios voluntarios de la Asociación Amigos de la Historia Najerillense -sacaron casi un centenar de toneladas de escombros de la antigua cárcel-, me urge preguntar unas cuantas cosas. ¿Existe realmente un proyecto o memoria valorada de lo que costaría dejar en óptimas condiciones la Casa de Cultura para trasladar allí el Museo? ¿Han preguntado nuestros gobernantes qué opinan los miembros de la Fundación  Museo Histórico Arqueológico Najerillense? Es más, ¿han sido oficialmente informados? ¿Han solicitado la opinión del director del Museo? ¿No sería infinitamente mejor dejar el Museo donde está, incluyendo el espacio del actual Juzgado de Paz, y crear cuantas salas quieran, divididas por tabiques de pladur, cristal, cartón piedra o del material que quieran, para estudio y reuniones en la Casa de Cultura? ¿Se han parado a pensar que llevarse el Museo allí sería uno de los mayores desatinos que se hayan cometido jamás en nuestra ciudad? Y además, ¿qué es y cuánto va a durar eso del Valle de la Lengua? ¿Un año? ¿Tal vez dos? ¿Y cuánta riqueza va a generar en Nájera?... Por favor, que alguien pare este dislate y salve el Museo.