domingo, 5 de noviembre de 2017

Mendaces y miserables.


Voy a ver si soy capaz de demostraros la maldad de los socialistas, sin llegar a cansaros. Comenzaré con el Pleno Extraordinario celebrado el 19 de Julio de 1.990. En dicho Pleno, en el punto 4: Proyecto de acondicionamiento margen izquierda del Najerilla, se aprobó por doce votos a favor y el mío en contra, el “Proyecto de acondicionamiento de la margen izquierda del río Najerilla” por un importe de 230. 729. 934 pesetas, cofinanciado por el Fondo Europeo para el Desarrollo Regional al 50%. Es decir, los vecinos de la ribera del Najerilla tenían que pagar más de 115. 000. 000 de pesetas por construir un paseo marítimo. PRIMERA MENTIRA. En el Pleno Extraordinario del 3 de Octubre de 1.990, también en el punto 4, se desestima dicho proyecto, con los votos en contra de López, Vélez +, Gallego, Gómez, Hervías, Garnica y Palacios -4 de la CIN, el mío, y 2 del PP. -SEGUNDA MENTIRA-, y los votos a favor de Maeztu, Hidalgo, Aldonza, Martínez, Lerena y Santamaría +. En el Pleno Extraordinario del 26 de Octubre de 1.990, después de haberle aplicado los socialistas a Carmelo Maeztu el 155, para que repitiera el Pleno -cosa nunca vista-, y de haberle estado mintiendo a todo el pueblo con unos panfletos que decían que ese Proyecto había sido redactado por los mejores Técnicos medioambientalistas de Europa -TERCERA MENTIRA-; diciendo con un letrero que si no se hacía el Proyecto, los 115 millones de pesetas se iban a Europa -CUARTA MENTIRA-, y recogiendo firmas por fábricas y establecimientos públicos, mintiendo como bellacos, volvió a ser rechazada por los mismos votos antedichos, y yo presenté mi dimisión irrevocable. O sea, que para nada me alié con el PP, porque aquella noche os mandé a todos a hacer puñetas, aun a riesgo de ser apaleado por el veneno que contra mí habíais  destilado. -QUINTA MENTIRA-  Pero mira por dónde, y eso es lo que vosotros no soportáis, lejos de pegarme, los najerinos -de todos los signos- me abrazaron, me besaron, me alzaron a hombros y me vitorearon largamente en el Ayuntamiento y en la Plaza de España, por mi coherencia. Y la subvención, como todos sabíamos, lejos de irse a Bruselas, se quedó en ¿Aldeanueva? Esta es la verdadera historia, y no la que cuenta un malvado a través de un pobre santo.

Samaniego se nos hunde.


Las alcantarillas existentes en la calle Samaniego, a la altura del número 36, se están hundiendo desde hace meses. Es una pena que en la fotografía se vea el bache plano, porque cabe, entre el fondo y la alcantarilla, un paquete de tabaco.