La tarde-noche de ayer fue espectacular y reivindicativa en el escenario principal del MUWI. Sin menospreciar a nadie, Rozalén, acompañada de una magnífica intérprete de lengua y signos para que nadie se perdiera detalle de este grandioso espectáculo, nos metió a todos y a todas en el bolsillo con su cálida y acariciadora voz y sus hondos y sinceros guiños a la niñez, al respeto, a la libertad, a la vida. Fue enternecedor escuchar a niñas y niños pidiéndole “Girasoles”, mientras miles de personas cantaban y bailaban enfervorecidas las canciones ”Sube a este tren”, “Vivir”, “La puerta violeta”… todas ellas acompañadas de preciosas proyecciones. La comunión entre la manchega -“de pueblo, con mucha honra”- y el público fue tal, que nos dijo, visiblemente emocionada, “qué concierto más bonito nos habéis regalado”. Y por si faltaba algo para completar este concierto de ensueño, Rozalén se bajó del escenario y cantó una canción entre el embelesado público. CALIFATO 3/4. Nada más abandonar el escenario Rozalén, aparecieron en él los Califato 3/4 con su rave cani flamenca, que no dejó indiferente a nadie. Cantidad de personas se quedaron boquiabiertas, porque no entendían qué coño estaban viendo y escuchando, y otras, empero, se quedaron maravilladas con su irreverencia y valentía. -No dejaron títere con cabeza-. En el escenario, cubriendo las cajas, lucían dos grandes banderas de Palestina, y al finalizar, animaron al público a gritar “Israel genocida”, consigna que coreó repetidamente una gran mayoría.
