sábado, 17 de junio de 2023

Qué caprichoso es el azar.

Nada más tomar posesión la nueva corporación, se desató una tormenta acompañada de un fuerte viento, que les dejó un chopo cruzado en el río Najerilla, en el puente de los pescadores, y otro en lo que hasta hace muy poco fue Parque Natural, cortando el camino del puente de tubos hundido sobre el río Muelo. -La corporación saliente taló más de seiscientos árboles “enfermos”, y ahora, de pronto, va el viento y les tira uno de los cuatro que dejaron sanos-. Por si esto fuera poco, heredan también el peligro cierto de la calle Samaniego, que nos va a dar un disgusto serio si no lo arreglan pronto. La que digo, el azar es tan caprichoso, que no les ha dejado ni saborear el triunfo.

3 comentarios:

R. Cerra dijo...

Los cuatro árboles mal contados que estos impresentables han dejado en pie, son los que no les servía para su aprovechamiento madero y muchos de ellos están muy debiles y enfermos, además de desprotegidos. En cuatro días se caerán o habrá que tirarlos.

Eusebio Hervías del Campo dijo...

“Los árboles son poemas que la tierra escribe en el cielo”. -Khalil Gibran-

Eusebio Hervías del Campo dijo...

Se les olvidó hacer la escultura de las motosierras en el plátano que abre el segundo Paseo.

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