martes, 4 de enero de 2011

Veintiuna, aceituna.

   Cuando vi, por sexta o séptima vez en quince días, la noticia de que El Cine Club pasará a manos del Gobierno regional a finales de enero (menos mal que no pone de qué año), me vino a la cabeza aquello de “donar” cuando éramos pequeños y nos íbamos a poner a jugar: “Una, dos, tres, cuatro”. “¡Basta!” “Cinco, seis, siete, ocho”, hasta llegar al veintiuna, aceituna, que era quien la quedaba por “pringao”.  Y es que la adquisición del Cinema Club parece el cuento de nunca acabar, y moneda de cambio en cualquier enfrentamiento electoral. Aquí nos da absolutamente igual lo que piensen los demás: prometemos todo lo que nos dé la real gana, y si se hace bien, y si no se hace igual. ¡Qué coño más da!
   Dicho esto, y si es verdad que lo adquiere el Gobierno regional para acondicionarlo como Centro de Atención a los Ciudadanos, lo menos que podemos hacer desde este blog, es pedirle que conserve los frescos de la fachada principal, y felicitarle por quitarnos de pagar alquileres millonarios, y por acabar con una de las muchas imágenes deplorables que a los visitantes les ofrece nuestra ciudad.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Si efectivamente ese edificio se dedicase a servicios públicos y se conservase la decoración de su fachada, esa sería una muy buena noticia.
Pero, a ver si con la calle Mayor va a pasar como con el Paseo. Son lugares de la ciudad muy especiales donde toda intervención debe hacerse con mucho cuidado.De ruinas y de moderneces horteras (otro tipo de ruinas aún peor) en la Calle Mayor estamos ya hasta donde no digan dueñas.
Estamos en el s. XXI y el Urbanismo es un patrimonio comunitario esencial. Hay que proteger la construcción nueva y la restauración pero hay que obligar a hacerla bien hecha y sin que devalúe la ciudad que es de todos los que viven en ella.

Eusebio Hervías del Campo dijo...

Habrá que estar expectantes, querido anónimo, e intentar hacer todo lo que esté a nuestro alcance para que así sea. Los frescos de la fachada creo recordar que están protegidos, aunque el edificio en sí, a pesar de las muchísimas alegaciones que registramos en el Ayuntamiento cuando salió a exposición pública el Plan General de Ordenación Urbana, creo que se quedó como estaba. No obstante, ahora no es un particular quien va a construir, sino nuestro propio Gobierno. Por consiguiente, aquí estamos todos nosotros para exigirles a Cultura, Urbanismo y Patrimonio, que le den el tratamiento que se merecen tanto el edificio como el entorno. Abrazos.

R. Cerra dijo...

Por la parte que me toca, creo mi querido anónimo que las recuperaciones en la calle mayor o en cualquiera del casco viejo de Nájera, pueden hacerse con calidad, buen gusto y cumpliendo toda la normativa. Otro cantar seria las facilidades o ayudas a recibir por estas actuaciones tan complejas. Pero la tranquilidad que se queda en el cuerpo de las cosas bien hechas y de los elogios y felicitaciones recibidos compensan.

Un saludo

Eusebio Hervías del Campo dijo...

Estando totalmente de acuerdo contigo, Amigo Rober (pusísteis una de las tiendas más bonitas de La Rioja), he de decirte que ahora no se trata de regatear con un particular; que ahora son ellos mismos quienes van a actuar, si es que la noticia es verdad. Dicho lo cual, creo que he manifestado públicamente un montón de veces, que en esta ciudad, lejos de primar el que se construya y se haga bien en el casco viejo, se ponen toda clase de obstáculos, como si el mismísimo Ayuntamiento no quisiera que nuestro casco hundido recupere la dignidad. Al constructor, o a las familias que son valientes, y deciden construir en el casco antiguo, no solo hay que exigirle una serie de requisitos para que lo pueda hacer, sino dejarlo exento del pago de licencias, y ayudarlo económicamente por mantener elementos susceptibles de conservar. Y a eso, ya que no quieren ni oir hablar de un Plan de Rehabilitación Integral del Casco Antiguo, les tendríamos que obligar. Abrazos.

Anónimo dijo...

Cerra: No pensaba en vosotros. Vosotros y algunos otros sois ejemplo de cómo la calle Mayor puede seguir siendo la arteria fundamental de la convivencia y el comercio, a la vez, que es exactamente lo que siempre fue... Pero, no todo ha sido así.
Aclarado esto, suscribo lo que tú escribes íntegramente.
Perdón, no volveré a generalizar. Es cometer segura injusticia.

Eduardo dijo...

Las pinturas de la fachada del Cinema Club están protegidas. Veremos lo que pasa si el Gobierno de La Rioja lo compra y lo rehabilita. Pero el precedente de que estando las pinturas protegidas taparan la fachada (y con ella las pinturas) con la foto del Coro de Santa María la Real con motivo de la exposición-bluff La Rioja Tierra Abierta (foto que ahí sigue) me hace temer lo peor de lo peor para las pinturas.
Como dijo entonces un amigo mío y yo suscribo: ¿si esas pinturas están protegidas y a los propietarios se les exige que las conserven, para qué las tapan?
También existe el precedente de que una casa que tenía un determinado nivel de protección y era propiedad de un ex-concejal fue derribada después de que el Ayuntamiento le rebajara el nivel de protección.

Eusebio Hervías del Campo dijo...

Ese ex-concejal ha hecho en Nájera lo que se le han puesto los santísimos huevos. Y lo peor de todo, es que esa casa que tú no citas pero yo sí sé cuál es (era, vamos), la queríamos rehabilitar nosotros (el FORO), para Albergue de la juventud (o algo así), y fue él quien más se opuso. En cuanto a los frescos que pintó el abuelo de Domingo, republicano, para más señas, ahí estamos todos nosotros: Partidos, Asociaciones, blogueros y el resto de ciudadanos, para obligarles a cumplir la Ley. Que igual va y la cumplen, y le cogen gusto. Abrazos.

Publicar un comentario