domingo, 9 de enero de 2011

¡Ojalá hubiese habido un chivato!

   Admirado y respetado señor Pérez-Reverte, soy seguidor suyo desde que, casi imberbe, iba usted con su mochila al hombro, como cronista de guerra, allá donde hubiera un conflicto armado, para enviar puntualmente sus crónicas a la televisión. Me imagino que esto se debe en gran parte, al parecido que usted tenía con un primo mío, que también andaba por esos mundos de Dios, ejerciendo como médico. Pues bien, desde entonces, le sigo y le leo, le admiro y le respeto. Con usted he reído y he llorado infinidad de veces, en mi sagrado silencio. Y he dado saltos de alegría en mi habitación,  cuando a través de sus artículos me he sentido vengado los domingos. Dicho esto, para que a nadie le quepa duda de lo que por usted siento, he de decirle, que creo conocerle un poquito, y que precisamente por ello, puedo entender que lo que usted quiso hacer el otro día con sus desafortunados comentarios, fue circarse (como usted dice) en los muertos de Leire Pajín, por sus comentarios sobre el papel de los ciudadanos en esta nueva ley antitabaco.  Pues bien, señor Pérez-Reverte, para no extenderme en demasía, le expondré solamente tres o cuatro de los casos que a mí me han marcado tanto, como a usted le han marcado las imágenes dantescas que ha tenido que ver y sufrir durante tantos años. Cuando un inocente niño no vio más salida al infierno que en clase estaba viviendo, que precipitarse al vacío para acabar así con su martirio: Ojalá hubiese habido un chivato que se lo hubiese chivado a sus padres, profesores o amigos. Cuando a una pobre ama de casa la violaban en plena calle, con toda la impunidad del mundo: Ojalá hubiese habido un chivato que se hubiese chivado a la policía o a su marido. Cuando cuatro energúmenos malnacidos, pateaban con sus botas de acero a un pobre chico tendido en el suelo, hasta matarlo, ante la mirada cobarde, canalla y miserable de cientos de personas bebiendo en la calle: Ojalá hubiese habido un chivato que se hubiese chivado a la policía, ya que ningún hijo de la gran puta de los que allí estaban hizo nada por evitarlo. Cuando a otro pobre joven, inconsciente en el suelo, unos descerebrados se dedicaban a patearle la cara (uno se la levantaba del suelo y la colocaba, y otros la golpeaban como si de un balón se tratara), mientras algunos vecinos lo filmaban: Ojalá hubiese habido un chivato que se hubiese chivado a la policía, o les hubiese estampado un tiesto en sus cráneos vacíos. Y así, mi admirado y respetado señor Pérez-Reverte, podría estar relatándole a usted un montón de trágicos y desgarradores sucesos, durante un buen rato. ¡Ojalá hubiese habido un chivato!   

4 comentarios:

Benjamin dijo...

Querido Cantor: Ultimamente la consideración de "chivato" no tiene distinción. Este foro se podría considerar como tal. Está visto que la falta de inteligencia no da para mas. Una cosa es el "chivato" tipico de colegio. "Profe, mire "fulanito" lo que esta haciendo ...". O de empresa, que tambien existen. Y muchos. Otra cosa es la denuncia ante el comportamiento incivico. Esto es otro cantar. La mayoria de las veces esta motivado debido a que nadie escapa al sentimiento de culpa. ¿Quien no sabe de algún familiar, amigo o conocido que esta cobrando el desempleo y hace trabajos "extra" y se calla?. Defraudadores que tienen pisos alquilados y nos los declaran como ingresos. Empresarios que están imcumpliendo sistematicamente con la Ley. Y un largisimo etceterea. Denunciar estas situaciones y otras similares ¿Es "chivatearse"?. No. Es simplemente "no meterse en lios". Estos mismos no tienen nigún "empacho" en poner a caer de un burro a cualquier personaje famoso. En el fondo todo acaba siendo muy simple: Somos un pais de "pillos" y encima, cobardes. Lo siento, pero soy muy pesimista en cuanto al cambio de etica en el español.
Abrazos.

Eusebio Hervías del Campo dijo...

Querido Amigo Benjamín. Yo soy un chivato, que se chiva a la CHE (Confederación Hidrográfica del Ebro), a la Consejería de Medio Ambiente, al Defensor del Pueblo, a Bruselas..., cuando los del Ayuntamiento, saltándose la ley a la torera, hacen de Nájera lo que les sale. Soy un chivato que se chiva mensualmente en la revista "La Crónica de Nájera" de cualquier comportamiento incívico. Soy un chivato que se chiva en este blog de todas y cada una de las injusticias que se hacen. ¡Soy un chivato! Y compararme a mí con el movimiento nazi, por ejemplo, es como situar a los gaznápiros del Ayuntamiento, trabajando denodadamente en causas nobles,y repartiendo su sueldo con los pobres. Pero insisto en que para mí, lo que le molestó a Reverte fue lo que dijo la Ministra Leire Pajín, y se le fue la tecla. Sea como fuere, y aun en contra suya, solo le pido a Dios, seguir siendo un chivato con coraje y sin flaquezas. Abrazos.

Fernando dijo...

Dialogo:
CIUDADANO: Oiga señor o señora, le importa no fumar en un sitio cerrado.
FUMADOR: Fumo porque se me pone en los ....
CIUDADANO: Además recuerde usted que está prohbido.
FUMADOR: A mi no me prohibe ni Dios fumar.
CIUDADANO: (Cambia su nombre por Chivato).
CHIVATO: Bueno, alla usted, yo voy a denunciarle.
Nota:
No todos los fumadores son asi, ni los ciudadanos son chivatos.

Eusebio Hervías del Campo dijo...

Qué alegría volver a leerte de nuevo, Amigo Fernando. Afortunadamente no es así: Todos groseros. Todos chivatos. Además, como ya he dejado escrito bastantes veces, los fumadores me han dado una lección de civismo y de saber estar, increíble. Abrazos.

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