sábado, 15 de enero de 2011

Los constructores son tontos.

   Esto es lo que debe pensar nuestra conspicua alcaldesa, que después de dos años de estar llenos de mierda, ha ordenado a la Brigada de Obras del Ayuntamiento, quitar las rejillas de hierro de todos los alcorques que los constructores habían dejado en las calles Santa Eugenia, Hormilleja y San Millán, para plantar árboles, y poner sobre ellos baldosas. Y es que no sé que coño se creen estos constructores. ¡Vamos! Dejar alcorques para poner árboles, con lo que ensucian, sobre todo cuando van los jilgueros a hacer sus nidos en ellos. Y encima hay que podarlos. ¡Quita, quita! Mejor baldosas. Total, como los vecinos también son tontos.

4 comentarios:

Eusebio Hervías del Campo dijo...

Queridos cantores míos, ¿pero es que no os provoca ninguna reacción, saber que nuestro ínclito Ayuntamiento alega falta de dinero para plantar árboles en nuestras calles? ¿Con qué vergüenza pueden argumentar eso, después de haberse gastado un dineral en un prescindible calendario? Abrazos.

R. Cerra dijo...

Mi querido Ilustre y Maestro Cantor.

Después de leer en la prensa, que los árboles son nefastos en nuestras calles, porque se "calan" en ellos los balones de los chavales, creo que está todo dicho de estos tontolabas.

Un saludo

Eduardo dijo...

La verdad es que ando un poco preocupado ultimamente conmigo mismo. Estoy en un momento en que cualquier cosa que venga de esta gente ya ni me indigna. Porque he llegado a tal punto de saturación que cada cosa que hacen, que dicen o que proponen no me sorprende. Me pasa con esta gente como en el lema de la medalla del amor que anunciaban en la tele cuando era un chaval: MÁS QUE AYER PERO MENOS QUE MAÑANA

Eusebio Hervías del Campo dijo...

¿A ver si vas a estar enamorado, Amigo Eduardo? Ten paciencia, Amigo mío, porque de aquí a Mayo, vas a ver y a oir cosas tan vomitivas, que puedes perder el hígado. Me alegro de volver a leerte. Abrazos.

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