martes, 6 de julio de 2021

Escrito hace quince años.

El Najerilla en Nájera, ¿río o canal?

El pasado 22 de noviembre una excavadora eliminó toda la vegetación del río Najerilla desde la pasarela peatonal hasta el entorno del puente de piedra. El Ayuntamiento justificó esta «limpieza» por los riesgos ante las crecidas del río, puesto que la cubierta vegetal que había nacido en varias isletas reducía su capacidad «porteadora». Las obras se efectuaron durante esas fechas porque se tuvo en cuenta que la zona es un tramo de pesca sin muerte y por entonces se encontraba fuera del periodo de pesca y de reproducción. Nos gustaría mostrar nuestra opinión contraria a las obras basada en sus efectos sobre los ecosistemas, la dinámica fluvial y el paisaje, y con ello, además, rebatir los argumentos que las justificaban. 1.- Sobre los ecosistemas: a) la eliminación de la vegetación afecta directamente a las aves que viven en ella. Gracias a las visitas que los alumnos del IES hacemos todos los años al río Najerilla con motivo del «Día Mundial de las Aves», sabemos que muchas especies ligadas a las zonas herbáceas y de matorral, como el ruiseñor bastardo, el chochín, el mirlo común o el carricero común no las podremos observar allí el próximo otoño. b) La remoción del lecho fluvial por el tránsito de máquinas (prohibido expresamente en los permisos concedidos para las obras por tratarse de un tramo de pesca sin muerte) y la eliminación de la vegetación provocan disminución de las poblaciones de macroinvertebrados acuáticos, alimento de diferentes especies de peces como las truchas, y, por tanto, también, del número de individuos de estas. Muchas de las larvas eliminadas ahora, iban a ser los adultos reproductores la próxima primavera. c) La propia Dirección General del Medio Natural en su informe indicaba que en las proximidades de la zona de actuación se localizaba una de las Áreas de Interés Especial para el visón europeo (la que va desde el puente de Arenzana hasta el casco urbano de Nájera) definidas en el Plan de Recuperación de la especie en La Rioja al estar considerada como «en peligro de extinción». Nos lo hemos leído y allí se dice que habita medios acuáticos, especialmente las áreas de vegetación densa próximas al agua. Al eliminar la vegetación (una de las causas de su desaparición), se impide que la zona actúe como corredor biológico del visón europeo y permita así el intercambio genético entre sus poblaciones aguas arriba y abajo de Nájera. Resulta que uno de los principales objetivos para su recuperación (recogido en dicho plan) es precisamente conservar y favorecer la progresión de su hábitat, evitando el deterioro, la fragmentación y reducción de la vegetación natural de ribera. También nos hemos leído la información referente al proyecto Life 2001-2004 (accesible en internet www.larioja.org/ma/), que supuso una inversión de 458.123 euros. Nos sorprende que después de invertir tanto dinero en conservar una especie y tener aprobado un plan de recuperación, un ayuntamiento no se entere de lo que tiene que hacer para ello, aun con el informe en la mano. Otra especie habitual en la zona, y que puede verse afectada por el resultado de las obras por las mismas razones que la anterior, es la nutria. 2.- Respecto a la dinámica fluvial, la eliminación de la vegetación tiene un serio efecto sobre las orillas ya que favorece su erosión, debido a que las raíces de los árboles estabilizan o sujetan el suelo e impiden que el agua lo arrastre (también se hacía mención a ello en los informes que autorizaban las obras y desautorizaban la eliminación de los sauces de las orillas). Por otro lado, es necesario saber que los ríos son sistemas muy complejos, no únicamente un cauce con agua. Forman parte de él las franjas laterales ocupadas por los bosques de ribera o sotos, las aguas subterráneas y el sistema geomorfológico, que es claramente visible en los meandros que todos los ríos trazan a lo largo de su llanura aluvial. La vegetación eliminada volverá a formarse de nuevo por un proceso de sucesión ecológica, que coloniza las isletas y la orilla de los meandros, donde el río deposita los materiales que arrastra desde su cabecera. La prevención de inundaciones no pasa por eliminar la vegetación sino por no canalizar los ríos, permitiendo de esta manera que el agua ocupe la mayor parte de la llanura aluvial. 3.- La «limpieza» ha provocado también un importante impacto paisajístico, y, aunque este es un aspecto muy subjetivo, hay mucha gente, entre la que nos encontramos, a la que no agrada el aspecto actual del río, más propio de un canal. Nos gustaría, por todo lo anterior, que no se volvieran a repetir los hechos, y proponemos desde esta tribuna que, si realmente se quieren evitar las inundaciones, la medida más adecuada es levantar el hierbín y desplazar la escollera lo más lejos posible del cauce, de manera que el río tenga una mayor capacidad de desagüe. Esa banda de la llanura de inundación, colonizada por la vegetación de ribera, podría ser habilitada como un paseo a la vez que serviría como corredor biológico para el visón europeo, la nutria y otras especies ligadas a los cursos fluviales. En este sentido hay otras iniciativas que nos parece interesante plantear: en la ley de conservación de los espacios naturales de La Rioja aparece la propuesta de Lugares de Importancia Comunitaria (LICs) riojanos para incluirlos en la «Red Natura 2000», la gran red ecológica que tiene como objetivo contribuir a conservar la biodiversidad europea. Viendo el mapa de esos lugares, se observa que no tiene nada de red porque los espacios incluidos (entre ellos las sierras de La Demanda y los sotos y riberas del Ebro) no están conectados entre sí, por lo que todas las riberas del Najerilla deberían proponerse como LIC y protegerse para asegurar esa conexión. Además, sugerimos al Ayuntamiento de Nájera y a la Consejería de Medio Ambiente la solicitud de un nuevo proyecto Life que permita obtener recursos económicos para la creación de un Centro de Interpretación del Visón Europeo en Nájera. Este centro sería el de visitantes del espacio protegido y contribuiría a potenciar el turismo de naturaleza en la zona, complementario del cultural que ya existe. Mientras esto sucede, nos parece interesante informar a particulares de las ayudas económicas de la Consejería de Medio Ambiente que se conceden a las choperas que respeten una franja de vegetación natural de 5 metros al lado de los cauces de los ríos o que permitan su regeneración. Es hora ya de que Nájera se conozca, además de por su rico patrimonio cultural y del mueble, por su más rico y desconocido patrimonio natural.

ABEL MERINO, ERICA SOTO Y CARLA URUÑUELA ALUMNOS DE CIENCIAS DE LA TIERRA DE 2º DE BACHILLERATO. JESÚS SERRADILLA ES SU PROFESOR EN EL IES 'ESTEBAN M. DE VILLEGAS' DE NÁJERA. -Miércoles, 22 febrero 2006, 01:00-

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