Operación abortada.

     Según cuentan los leídos najerinos en sus facebook, esta mañana, con un papel en la mano y dos cojones, un amigo y yo nos hemos personado en el Puente de Piedra, donde miembros de la Brigada de Obras estaban llevando a cabo la “operación limpieza del río”, ayudados por tres Guardias Municipales, y les hemos obligado a abortar la operación. ¡Así, como suena! Y ya que estos ínclitos najerinos nos han pillado, os confesaré cómo ha sido. Hemos llegado allí, les hemos pedido la documentación a todos -siempre enseñando el papel-, les hemos solicitado los permisos pertinentes, y, a continuación, les hemos ordenado parar inmediatamente, apercibiéndoles a todos ellos, de que estaban denunciados, según la actual “Ley Mordaza”, por “desacato y resistencia a los ecologistas”, por “operación ilegal”, y “porque se nos ponían los cojones”. ¡Que para eso somos ecologistas y jueces! La multa que les hemos impuesto va de los 30.000 a los 300.000 euros. Con el agravante de que si un día de estos vuelve a bajar otra crecida y no está taponado el puente, irán todos ellos a la cárcel. ¡Hala, que se pase!